Querida Abigail,
No sé si las palabras pueden expresar la culpa y el arrepentimiento que siento por el daño que te hice. Lo que ocurrió fue un error inmenso, uno que jamás debí cometer, y me pesa profundamente. Me doy cuenta de que te fallé de la manera más dolorosa posible, no solo como pareja, sino también como persona que te debía respeto, confianza y amor incondicional.
Sé que mis acciones fueron completamente injustificables, y no hay excusa que pueda aliviar el dolor que te causé. Te fallé en algo fundamental, y eso me duele enormemente. Cada vez que pienso en lo que hice, me encuentro con un sentimiento de vergüenza que me resulta difícil de manejar.
Quiero que sepas que lo que más me importa es que estés bien, tanto emocionalmente como en tu día a día. Te respeto profundamente por la persona que eres, por tu fortaleza, tu amor y por lo que sigues representando en mi vida, aunque sé que ya no podamos estar juntos de la manera en la que alguna vez lo estuvimos.
Lo más importante para mí ahora es que Charlitos crezca en un ambiente lleno de amor y respeto. Quiero ser un buen padre para él y, aunque entiendo que nuestra relación ya no es la misma, haré todo lo posible para apoyar y ayudar en lo que necesites para que Charlitos tenga el mejor bienestar.
Sé que el tiempo y las palabras son solo pequeños pasos para reparar el daño que hice, pero lo que más quiero es que sepas que estoy dispuesto a trabajar en mí mismo, aprender de mis errores y hacer todo lo que esté a mi alcance para ser una mejor persona, tanto para ti, para Charlitos, como para mí mismo.
Lo que más lamento es haberte hecho daño, y te pido perdón desde lo más profundo de mi corazón. Si algún día consideras que puedo enmendar algo, estaré aquí para escucharte y aprender de lo que puedas necesitar.
Con todo mi cariño y respeto, Pax, tu ex que te extraña